Cómo Preparar a tu Familia Para Su Primera Visita a México (Parte 2)

Ir a casa después de una larga ausencia es un sentimiento maravilloso. Para aquellos que están haciendo el viaje por primera vez, esta vez puede ser agridulce. Preparar a tu familia de antemano le ayudará a eliminar el miedo a lo desconocido y solo le dejará recuerdos para crear.

En mi último artículo discutimos el viaje, la familia y la cultura. Esta vez cubriremos las costumbres familiares, dejaremos un pedazo de uno mismo y regresar a casa.

Todos los fotos tomado por y propiedad de Mary Jaimes-Serrano

Prepárelos para que se respeten las costumbres

No importa a dónde viaje en México, encontrará costumbres que deben seguirse después de una ausencia prolongada. Para la familia de mi esposo, esta es una visita a la iglesia en San Lucas. Esta visita es para agradecer a la Virgen María por un viaje seguro. Esta es una hermosa costumbre hecha para unas mini vacaciones encantadoras que disfrutó toda la familia. Mi esposo me había preparado de antemano, así que sabía que era una costumbre obligatoria. Sin embargo, hay muchas costumbres que alguien de los Estados Unidos no sabría. Asegúrate de que tu familia esté consciente, para evitar cualquier sentimiento de inquietud cuando se enfrente a estas costumbres. Esto permitirá a su familia disfrutar de las costumbres por lo que significan y realmente son.


Todos los fotos tomado por y propiedad de Mary Jaimes-Serrano

Explicar el sentido de dejarte atrás

Una cosa para la que nadie me preparó y realmente debería abordarse es la sensación de dejarte en México. Pasamos un mes viviendo la vida cotidiana de mis suegros. Llegamos a conocer bien a la gente y desarrollamos apegos cercanos. Cuando llegó el momento de decir adiós descubrí que no queríamos hacerlo. Nos hubiera gustado quedarnos un tiempo indefinido. Si bien esto no siempre puede ser el caso, podría ser. Prepara a su familia para lo difícil que será despedirse de los miembros de la familia que acaban de conocer.


Todos los fotos tomado por y propiedad de Mary Jaimes-Serrano

Prepararlos para la emoción de volver a casa

Por último, una de las cosas más difíciles de tratar es volver a casa. Cualquiera que haya venido a los Estados Unidos y dejado a sus seres queridos en México sabe el dolor y la tristeza que se siente cuando finalmente se resuelve. Para alguien que nació en los Estados Unidos y nunca viajó fuera de sus fronteras, este sentimiento puede ser abrumador. En los Estados Unidos, estamos acostumbrados a visitar a la familia cuando queremos. Los niños pueden crecer y mudarse a otro estado. Pero no es difícil subirse al auto e ir de visita. Cuando esa familia está en otro país y la posibilidad de visitas obstaculizadas por las fronteras, el dolor se vuelve devastador. Era un sentimiento que ni yo ni mis hijos estaban preparados para cuando regresáramos a casa. El deseo de visitar a nuestra nueva familia causó tristeza y una sensación de pérdida. No puedo empezar a imaginar el dolor sufrido por aquellas familias que están separadas sin la esperanza de visitarlas. Este es definitivamente un tema que debe ser discutido antes de realizar su viaje. No es que los sentimientos cambien, pero estar preparado hace que el manejo de estos sentimientos sea más fácil de soportar.


Todos los fotos tomado por y propiedad de Mary Jaimes-Serrano

Si bien la visita de cada persona a otro país será diferente, es importante asegurarse de que su familia esté preparada para disfrutar su viaje al máximo. Tomarse el tiempo para discutir qué esperar y lo que uno puede sentir puede eliminar el estrés excesivo y dar paso a unas vacaciones familiares llenas de recuerdos de por vida.

Añorando los Tamales de mi Tierra

Por Rocio Monroy

Hay muchas cosas que recordar de México. Ciertamente es un país lleno de costumbres y tradiciones, entre ellas el día de la Candelaria. No solo significa que los carnavales están a punto de comenzar, sino que también la producción de tamales aumenta al doble. Sin embargo, para nosotros que vivimos del otro lado del border podría no ser un día de celebración, sino más bien un día de nostalgia.

Photo by Dennis Schrader on Unsplash

Ahora que vivimos en un país con leyes y reglas diferentes, el señor de los tamales es simplemente una leyenda urbana. Ya no podemos despertarnos a las siete de la mañana para corretear a ese señor con su carrito lleno de delicateses. En su lugar, tenemos que conformarnos con tamales congelados que se encuentran en el supermercado. Los cuales, por supuesto, no saben para nada a lo que estamos acostumbrados.

Photo by Daniel Apodaca on Unsplash

Esto nos hace pensar que comer tamales en el “gabacho” es realmente un privilegio. Si alguien de nuestro círculo de amigos sabe preparar tamales, lo atesoramos como si fuera oro. De lo contrario, nos vemos obligados a comer tamales calientitos y frescos solo cuando vamos a un restaurante “mexicano” donde te sirven un tamal con todo tipo de condimentos e ingredientes extras que son completamente innecesarios, tales como crema, queso, carne molida y pico de gallo. Estos tamales no solo nos cuestan un ojo de la cara, sino que también no tienen ese sabor tan especial que nos alegra el alma. 

Photo by Justine Camacho on Unsplash

Es difícil, sin lugar a duda, preservar nuestras costumbres cuando nunca aprendimos a cocinar como nuestras madres o cuando no podemos igualar ese sazón de la abuela. Aun así , no debemos darnos por vencidos, ya que de lo contrario nuestras tradiciones o costumbres se perderán tarde o temprano.

Photo by Gaelle Marcel on Unsplash

La práctica hace al maestro

En México hay cientos de recetas para hacer tamales. Los tamales rojos son más populares en la parte del norte, mientras que, en el centro del país los preferidos son los verdes. En el sur, existen los famosos tamales oaxaqueños.

No importa cuál sea tu preferido, busca la receta en Internet y comienza a practicar lo antes posible. Tal vez, los primeros que hagas no serán los mejores, pero con el tiempo te convertirás en un master en el arte del tamal.

Aquí hay un link con diferentes recetas de tamales, que te podrían ayudar a comenzar.

Photo by Drew Farwell on Unsplash

No pierdes nada con intentarlo

Organiza tu propia fiesta del día de la Candelaria. Muchas veces no celebramos los días festivos de nuestro país porque nuestra familia no esta con nosotros. Sin embargo, a veces es buena idea celebrar con nuestros amigos mas cercanos, incluso si no son mexicanos. Esta seria una buena oportunidad para introducir la cultura mexicana a otras personas, para que conozcan un poco mas de México y lo amen tanto como tú. 

Cada año será mejor

Tal vez sea difícil comenzar tus propias tradiciones, especialmente cuando en la tierra que te vio nacer se siguen haciendo las cosas exactamente como el día en que te fuiste. Pero no pienses que estas cambiando las reglas del juego y estas dejando tu vida pasada atrás. El comenzar tus propias tradiciones te ayudará a mantener a nuestro querido México en tu corazón.

Photo by Dennis Schrader on Unsplash

El tamal es amado por muchos, tiene un sabor especial e inigualable. Vale la pena aprender como cocinarlos para que les enseñemos a las nuevas generaciones de que está hecho México. No solo de hermosas playas, ciudades y gente, sino también de platillos únicos que alegran los corazones.

Recordando las Tradiciones Mexicanas de Inicio de Año

Nosotros los inmigrantes, sobre todo los de primera generación, nos hemos adaptado a las festividades y tradiciones estadounidenses y las festejamos como todo el resto. Sin embargo, provenientes de diferentes países de Latinoamérica, incluyendo México, tenemos nuestras propias tradiciones y costumbres, aquellas que nos causan nostalgia al recordarlas, y que es muy posible que nuestros hijos nacidos aquí no sientan el mismo apego o ni siquiera sepan acerca de ellas. Son las que forman nuestra idiosincrasia, nuestro origen y que viven muy dentro de nuestro corazón y recuerdos.

Después de las fiestas decembrinas, llega el 6 de enero y a quién no le encanta partir la Rosca de Reyes, una tradición cristiana en honor a los tres Reyes Magos: Melchor, Gaspar y Baltazar, quienes, siguiendo la estrella de Belén, buscaban encontrar al Niño Jesús para ofrecerle oro, incienso y mirra.

Que emoción es dar una mordida a ese pedazo de rosca, con la sorpresa de llevarse entre los dientes al muñequito. Si te sabes la historia, encontrarás mucha alegría al contar a tus hijos y familiares la razón por la que ese muñequito se encuentra allí, siendo la misma representación del Niño Jesús y a disfrutar con un rico chocolate de un fantástico rato familiar de esos que no tienen precio y de los que se componen los mejores momentos de la vida. ¿Te tocó el muñeco? Pues te toca invitar los tamales el día 2 de febrero, Día de la Candelaria. Ese producto esencial y delicioso que ha sido la base de la alimentación de los pueblos prehispánicos y continúa hasta nuestros días como un alimento que tiene una presencia preponderante en cualquier celebración y en la vida diaria.

El Día de la Candelaria, una fecha rica en tradición y que, según varios historiadores, representa para cada país como en España, la fiesta de la Virgen de la Candelaria y en la comunidad cristiana, la presentación de Jesús en el Templo y la purificación de la Virgen después del parto. En México, representa la temporada de siembra durante la época prehispánica donde los mexicas bendecían el maíz para ofrecerlo al dios Tláloc, entre otros (dios de la lluvia y la fertilidad en la cultura azteca) y con la evangelización de los pueblos indígenas durante la época del virreinato, se hizo costumbre comer los antes mencionados y deliciosos tamales.

Esta celebración hispana también tiene su representación en la Calle Olvera del centro de Los Ángeles, donde se lleva a cabo la bendición de los muñequitos vestidos representando al niño Jesús cuando fue presentado al templo. Así que esta celebración católica-cristiana tiene una muy buena acogida para degustar de ricos antojitos, pero un gran motivo para enseñar a nuestros hijos acerca de nuestras tradiciones y que no caigan en el olvido.

No te hagas, te salió el muñeco en la rosca y ahora te tocan los tamales para el Día de la Candelaria y que alguien más se encargue de preparar el atole y asegúrate —eso sí — de que cada uno de los que disfruten de la fiesta pongan su grano de arena, con una gran sonrisa.

Como Comer Sano en Enero, sin Olvidar tus Raíces Mexicanas

Por Rocio Monroy

El año nuevo ya ha comenzado y por centésima vez nos hemos prometido a nosotros mismos que la dieta empezará el lunes. Se podría decir que esta es una tradición tan mexicana como la rosca de reyes. Pero seamos honestos, es difícil renunciar a las garnachas que se venden por doquier. Simplemente al principio de año ya estamos en espera de comer rosca de reyes, tamales y champurrado.

Sin lugar a duda, la comida mexicana es una exquisitez. Son pocos los que pueden resistirse a comprar unas papitas con salsa o un elote hervido con mayonesa y chile del que pica. Uno de los sueños de todo mexicano es poder tener una montaña de tacos, gorditas y tamales. Comer tantos dulces picositos como puedan y nadar en una alberca llena de champurrado.

Desafortunadamente, y aunque nos duela aceptarlo, cuando se trata de antojitos mexicanos muchas veces tenemos que consumirlos con moderación. No es que los alimentos mexicanos no sean saludables. El maíz que es usado en muchos de los alimentos que comemos día a día está lleno de fibra. Las verduras tales como, cebolla, tomate, jitomate y chile son indispensables en muchos platillos mexicanos.

Así que, ¿qué es lo que estamos haciendo mal?

¿Será posible que como mexicanos, empezar una dieta es casi imposible?

Como decía una de mis tías, el problema no es la comida, son los condimentos que le agregamos a la comida y el pan.

Sí, en efecto, esas conchas esponjositas y chocolatosas no son tus amigas. Sin embargo, no dejemos que cunda el pánico. No se trata de dejar de comer nuestros postres favoritos. Para estar fuerte y saludable simplemente tienes que comer balanceadamente, y como Popeye nos decía, no olvides las espinacas.

Además de eso recuerda:

Agregar una buena cantidad de verduras a tus platillos

No solo porque contienen una gran cantidad de vitaminas y minerales, sino porque también pueden hacerte sentir satisfecho más rápido. De esta manera evitaras comer en exceso.

Tomar agua en lugar de refresco o bebidas azucaradas

Las aguas de sabor son una gran parte de la alimentación mexicana. No obstante, contienen mucha azúcar, lo cual podría provocar muchas enfermedades como la obesidad, caries y hasta diabetes. Por el bien de nuestra salud, es mejor consumir bebidas azucaradas de vez en cuando o en moderación.

No servirse comida más de dos veces

Tal vez estamos acostumbrados a comer grandes cantidades de comida por todas las veces que la abuela nos hizo comer hasta casi explotar. Sin embargo, muchos expertos en la salud recomiendan comer simplemente hasta sentirse satisfecho. Esa famosa frase que dice, “Estómago lleno, corazón contento” sería mejor dicha de esta manera, “Estomago satisfecho, corazón saludable”.

Photo by Emily Sea on Unsplash

El ser mexicano viene con muchas responsabilidades, entre esas es comer pan de muerto el día de los muertos y pozole los fines de semana. Sin embargo, aunque sea parte de la cultura que no queremos dejar atrás a pesar de vivir en otro país, muchas veces necesitamos detenernos a pensar en nuestra salud. Reducir la grasa y el azúcar en nuestros alimentos no nos hará menos mexicanos. Recuerda que, aunque vivas del otro lado del borde, en nuestros corazones siempre seremos mexicanos.