Por Rocio Monroy
Tal
pareciera que más y más videos surgen en el internet acerca de americanos
atacando a las personas de habla hispana por no hablar inglés en las calles.
Sin embargo, su argumento de que “Esto es América, aquí se habla inglés” es
totalmente inválido. En primer lugar, no hay ninguna ley que prohíba hablar
español en los Estados Unidos.
Y,
en segundo lugar, los mexicanos emigrando a los Estados Unidos no es algo que
haya pasado de la noche a la mañana. Los mexicanos y la lengua española han
sido parte de este país por varias décadas. Los mexicanos se han establecido
aquí y han esparcido su cultura y lenguaje por diferentes ciudades, como por
ejemplo:
Chicago, Illinois
Chicago
alberga la segunda población más grande de inmigrantes nacidos en México en los
Estados Unidos. La primera gran ola de migración fue impulsada por los
disturbios políticos en México a principios del siglo XX. Una vez que los
inmigrantes entraron al país por la frontera suroeste, viajaron hasta Chicago
en tren.
En
ese momento, Chicago era un centro industrial en crecimiento, con empleos de
bajos salarios disponibles en industrias como empacadores de carne, algo que no
atraía a los trabajadores nativos.
Ahora
en la actualidad, ciertas calles están llenas de puestos y tiendas mexicanas, y
la gente celebra las tradiciones mexicanas y chicanas, como el día de los
Muertos y el cinco de mayo, con desfiles y fiestas.
Los Angeles, California
Si alguna vez has visitado la ciudad de México, notarás que Los Ángeles y la ciudad de México tienen muchas similitudes. Hay vendedores ambulantes por todas partes, tiendas mexicanas y hasta tiendas de vestidos para quinceañeras.
No
hay nada más histórico en Los Ángeles que el Monumento Histórico de El Pueblo
de Los Ángeles. Sitio de los primeros pobladores de la región, y se estableció
en 1781 como centro de la ciudad. El complejo tiene 27 edificios históricos,
incluyendo casas e iglesias privadas, como la Iglesia Católica Nuestra Señora
Reina de los Ángeles que fue construida en 1822. Esta iglesia es la más antigua
de Los Ángeles. Muchas de las estructuras fueron construidas mientras
California todavía estaba bajo dominio español y mexicano.
En
esta ciudad, se puede caminar por la calle empedrada mientras los vendedores
luchan por la atención de los turistas para poder venderles juguetes, velas,
artículos de cuero y joyas, justo como en los lugares turísticos de México.
Además de que se puede comer taquitos hechos con tortillas a mano.
Definitivamente este lugar te da una probadita de México.
Houston, Texas
Se
podría decir que la cuidad de Houston es más mexicana que americana, ya que
este territorio solía ser parte de México. No es una sorpresa que en esta
ciudad se hable español y se festejen muchas tradiciones mexicanas.
En
1836, los recién llegados de los Estados Unidos, junto con sus aliados tejanos
(mexicanos de Texas), se levantaron en armas contra el gobierno mexicano y se
separaron exitosamente de esa nación. Después de la Batalla de San Jacinto, que
puso fin a la Revolución de Texas, los tejanos (anglo-tejanos) ordenaron a los
prisioneros mexicanos que limpiaran el pantano sobre el que se construiría
Houston. Después, la mayoría sería enviada a casa, pero muchos se quedaron,
creando el punto de partida de los primeros asentamientos mexicanos en la región
de Houston.
Los
mexicoamericanos trabajaban en la mayoría de las industrias y establecieron una
variedad de negocios que sentarían las bases para una economía
mexicano-estadounidense bulliciosa.
Tradicionalmente, trabajaron como sastres, oficinistas, cocineros y
fabricantes de botas, como Feliciano Medel, quien ayudó a convertir a Houston
en la capital de la fabricación de botas del oeste. Muchos trabajaron en las
refinerías de petróleo, en astilleros ferroviarios o en tripulaciones que
construían el Canal de Navegación de Houston.
Con
el tiempo, varias empresas de propiedad de mexicanos estadounidenses surgieron
en toda la ciudad. Los mexicoamericanos establecieron una variedad de
organizaciones sociales, culturales, religiosas y políticas para brindar apoyo
a otras comunidades.
Phoenix, Arizona
Cada
año, del 15 de septiembre al 15 de octubre, Estados Unidos celebra el Mes de la
Herencia Hispana para reconocer las contribuciones económicas, culturales y
sociales de los más de 50 millones de latinos que residen en Estados Unidos. En
Arizona, cerca del 30% de la población es de origen hispano o latino.
Los
mexicanos han habitado Phoenix desde 1868 y han sido parte del desarrollo económico
y cultural de esta ciudad. En 1886, Henry Garfias se convirtió en el primer
miembro de la comunidad mexicana en ser elegido funcionario de la ciudad. En el
siglo XX se crearon organizaciones, como la Liga Protectora y la Sociedad
Zaragoza, que dieron una voz política más fuerte a la población mexicana
subrepresentada. En 1953, otro miembro de la comunidad mexicana, Adam Díaz, fue
elegido miembro del consejo municipal. A medida que avanzaba el siglo, la
población México-estadounidense creció y se expandió en varias áreas de
Phoenix, y hoy en día la importante comunidad está creciendo.
En Phoenix, un número de organizaciones planifican festivales que celebran el Día de los Muertos, incorporando muchas de las tradiciones, incluyendo procesiones, exhibiendo altares y exhibiendo calaveritas de azúcar, catrinas y esculturas.
San Diego, California
En Old Town San Diego, se siente como si viajaras al
pasado y pudieras vivir como vivía la gente a principios del siglo XIX. Esta
ciudad está compuesta de históricas estructuras de adobe, además de que aquí se
alberga una variedad de festivales culturales que reflejan y celebran la
herencia mexicana de la ciudad. El Centro Cultural de la Raza es un centro
multidisciplinario que se dedica a promover, preservar y exhibir el arte
chicano, mexicano e indígena.
El Parque Histórico del Estado de Old Town está lleno de varios restaurantes populares mexicanos auténticos, donde se siente el ambiente de cantina que prevalecía durante la era del Viejo Oeste. Además de que se ofrece entretenimiento musical diario gratuito. Los fines de semana, es escenario de bandas de mariachis y bailarines folklóricos y hay exhibiciones rotativas y una variedad de espectáculos teatrales, de danza y música.
Fuentes: