¿Cómo Contribuye la Población Mexicana en la Economía Estadounidense?

Estamos acostumbrados a leer o escuchar mucho sobre la contribución que realizamos los mexicanos que vivimos en los Estados Unidos a la economía de México. Siempre se habla sobre cómo las remesas que son enviadas por paisanos influyen en la economía de nuestro país. 

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Tan solo en el año 2020, según informó el Banco de México, se enviaron más de 40,000 millones de dólares en remesas lo que constituye aproximadamente en un 3.8% del PIB, pero no nos enteramos con frecuencia de cómo la población migrante mexicana contribuye en la economía estadounidense.

Para dimensionar el impacto que tiene la población mexicana en la economía estadounidense tendremos que entender un poco de la historia de esta vieja relación que existe entre los migrantes mexicanos y el país que nos acoge desde hace años.

Todo nos lleva a las dos guerras mundiales, donde Estados Unidos tomó parte activa de esas batallas y sufrió un desabastecimiento de obreros en industrias, construcciones, y campo. Vamos a remontarnos a las primeras décadas del siglo XX. Para esas fechas, cerca de 16,000 mexicanos ya eran la fuerza laboral principal (60%) en el muy innovador sector de las ferrovías, solo por tomar un ejemplo.

El programa más ambicioso de trabajadores visitantes fue el llamado “Programa Bracero”, que se da entre 1943 y 1964. Este extenso programa atrajo a cerca de 2 millones de trabajadores temporales mexicanos a los cultivos de 30 estados de la unión americana. 

Es de suma importancia entender que de no ser por este tipo de programas los Estados Unidos, con su falta de personas capaces de trabajar en los sectores primarios de la economía se pudieron llegar a enfrentar a una de las crisis económicas-alimentarias de su época. Nosotros ya sabemos que existen diferencias sustanciales entre los niveles de vida de los distintos países, esto a su vez contrajo las masivas deportaciones a lo largo de los años.

¿Qué hay de la actualidad?

Lo anterior solo es parte de la historia del fenómeno de la migración mexicana, sin embargo actualmente cerca de 36 millones de mexicanos y personas de origen mexicano viven en los Estados Unidos. Veamos a futuro casi la mitad de los latinos nacidos en Estados Unidos tiene menos de 18 años, en comparación a solo el 20% de los estadounidenses no hispanos de raza blanca son menores de 18.

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Esto nos quiere decir que los esfuerzos para solventar las demandas del mercado se van a dirigir al grupo población más reciente debido a que se tienen que diseñar estrategias de marketing y publicidad. En resumen el poder de los latinos irá cada vez más en aumento gracias al ritmo de crecimiento del PIB.

Los mexicanos son el grupo hispano más grande del país y algunos informes estiman que los mexicanos y los mexicanos estadounidenses tienen el poder adquisitivo de cerca de $881.000 millones o el 57.2% de la capacidad adquisitiva de la población latina.

No olvidemos la presencia de los mexicanos en las industrias. Sabemos por la historia, que dentro del sector hispano, los mexicanos se han destacado por su capacidad para desenvolverse en la industria agrícola, pero que cerca el 30% de la población que trabaja en ese sector es de origen mexicano.

Según el periódico Milenio, casi el 25% de negocios de construcción pertenece a los mexicanos y a los servicios de profesionales les pertenece el 22% aproximadamente. Para el 2026 se estima que esta cifra incrementará en un 11% en el sector de la construcción, lo cual es una cifra significativa en lo que concierne a las ocupaciones de los Estados Unidos.

Esto nos quiere decir que existe una buena cantidad de personas en diferentes sectores económicos de origen mexicano que están generando dinero y que además están posibilitando a la siguiente generación acceder a mejores opciones de empleo y contar con una mayor posibilidad de consumir más productos y servicios.

La migración se volvió parte fundamental a la hora de solventar y llenar esos espacios y vacantes laborales de la pirámide población en específico donde la cantidad de adultos estadounidenses mayores de 55 años aumentara cerca del 50% más que el año anterior. 

Si de pronto desaparecemos a todos los migrantes, los Estados Unidos no podría con una base de contribuyentes reducida por la enorme cantidad de personas migrantes que de pronto ya no estarían disponibles para realizar esas contribuciones que afectan el día a día. Estaría en riesgo cuestiones (no solo la jubilación) de programas sociales con los que cuentan, como es el caso de la seguridad social o los diferentes programas de medicina.

Si lo ponemos en contexto nos vamos a dar cuenta que los mexicanos representan un muy buen porcentaje de personas que no solo se dedica a trabajar en “x” o “y” sectores, sino que contribuyen a los gravámenes de ese país con el motivo de obtener la mayor cantidad de beneficios por parte del Estado Norteamericano. Además de eso, son en buena parte productores de productos y servicios que comúnmente podemos llegar a dar por sentado, y que si de pronto dejara de realizarlo, nos encontraríamos en una situación netamente problemática.

Aún y con las pretenciosas leyes anti-migración, lo que hay que entender es que los Estados Unidos crearon una simbiosis con los mexicanos y las personas de origen mexicano, como lo mencionamos anteriormente, no solo por ámbito de la producción, sino, porque los jóvenes serán el nuevo mercado al cual tendrán que abordar las empresas nacientes o ya consolidadas; sin dejar de olvidar que la mejor forma para generar una mayor cantidad de empleo no se encuentra en los programas sociales, sino en que los países sean capaces de eliminar buena parte de la burocracia que impide legalizar a personas que solo emigran por tener una vida mejor y que en general son necesarias para aumentar el poder adquisitivo de una persona. 

Es decir, mientras más seas capaz de solventar las demandas del mercado es mucho más probable que puedas volverte parte de ese círculo virtuoso donde a mayor consumo, más producción y entonces existirá una mayor cantidad de empleo.

Los primeros mexicanos en emigrar entendieron la importancia de adaptarse a las exigencias, es por eso que a la fecha forman una parte muy importante de una de las economías más grandes del mundo. 

Día de las Madres: ¿Qué Hacemos los Mexicanos en Estados Unidos para Celebrarlo?

El día de las madres es una de las fechas más celebradas alrededor del mundo, y en Estados Unidos no es la excepción, la única diferencia es que el día de las madres en México se celebra el 10 de mayo y en Estados Unidos es el segundo domingo de mayo.

Todo comenzó hace un poco más de cien años, en 1909, cuando Ana Jarvis, una estadounidense del estado de Virginia del Oeste, inició una lucha para que todas las madres trabajadoras que aportaban económicamente a su casa tuvieran mejores condiciones laborales y de salud, pero su lucha no tuvo frutos hasta que en 1914 el presidente Woodrow Wilson retomó esta lucha e hizo oficial el día de las madres, pero no con el enfoque inicial sino con una visión de celebrar a todas las madres del país.

El día de las madres en México no se celebró hasta 1922, que el periodista Rafael Alducín empezó a organizar el movimiento. Él solicitó apoyo a la iglesia católica, José Vasconcelos, y diferentes sectores del país. Gracias a él, a su movimiento, y a todas las personas que lo apoyaron, a partir de ese año se comenzó a celebrar el día de las madres en México, de hecho, este fue el primer país que comenzó con esta celebración en toda América Latina. El 10 de Mayo fue el día que se nombró como día de las madres y desde ese entonces lo celebramos todos los mexicanos.

Pero ¿cómo se da la fusión cultural entre las tradiciones Mexicanas de todos los que vivimos en Estados Unidos, y las mismas tradiciones de este?

Para empezar, que el día sea diferente en ambos países puede llegar a causar un pequeño shock entre los que vivimos en el país, pero fuimos criados con tradiciones Mexicanas. Se podría pensar que cambiar el día no es mucho problema si festejamos lo mismo y durante el mismo mes, pero la realidad es que existe un gran arraigo a la fecha, y ni el cambio de país ni de costumbres nos lo puede quitar. Aunque puede ser más conveniente celebrar a las madres un domingo donde la mayoría descansamos, no se siente el mismo sentimiento de pertenencia entre una fecha y otra.

¿Entonces cómo celebramos los compatriotas que vivimos el sueño americano?

Las personas somos seres de costumbres y es difícil que solo por haber cambiado de país cambiemos todas nuestras costumbre; además hay que tomar en cuenta que la mayoría de las madres de las que somos la primera o la segunda generación viviendo en Estados Unidos, o viven en México, o aunque vivan en el país siempre han celebrado el 10 Mayo. El estar ubicados en un lugar distinto no cambia la tradición. El segundo domingo de Mayo solo es otro día más, tal vez este año que el día cae en 9 en lugar de 10 podamos celebrar a la par de nuestros vecinos gringos, solo por la conveniencia de que es un día de descanso.

A los mexicanos nos gusta celebrar, hacer fiesta, y conmemorar el día. El celebrar el día de las madres en México no es solo esa parte materialista donde le compras unos bonitos aretes y le mandas una tarjeta sin visitarla o apapacharla. El día de las madres a los mexicanos, comparado con los gringos, nos gusta celebrarlo en grande como todo. Organizamos comidas familiares, o llevamos a mamá a comer, se reúne la familia, y si se puede, hasta le llevamos mariachi.

Como en todo hay dos caras de la moneda y muchos de los inmigrantes simplemente no pueden festejar ese día porque tienen años sin ver a su madre que está en México. Realizar un viaje al país natal es complicado para una visita tan corta, sin embargo aunque no celebren en persona, la llamada y el recuerdo siempre lo tendrán el 10 de Mayo.

Al final del día no importa el país en el que estén tú o tu madre si no el amor y los recuerdos que tienes con ella.

El Día del Trabajo y los Mexicanos que Viven en USA

Una de las cosas más interesantes en la vida cotidiana, es el trabajo, empleo, o como tu prefieras decirle. El primero de mayo de todos los años se celebra internacionalmente el día del trabajo y por lo menos en México, la mayoría de los que tienen un empleo no laboran.

Pero, ¿por qué se celebra? ¿hay algo especial que recordar por ese día o por esa acción en específico?

Bueno lo cierto es que la historia nos lleva a las huelgas laborales en el país vecino del norte de México, sí, efectivamente los Estados Unidos de América. Las primeras huelgas se dan al filo de la revolución industrial a lo largo del siglo XIX en la ciudad de los vientos, es decir, en Chicago, que para ese momento era la segunda ciudad más grande del vecino americano.

En general, se buscó establecer leyes y reglas que evitaran el agotamiento excesivo y la explotación por parte de los dueños de las fábricas, industrias y diversas empresas que existían en su momento. Una de las cosas más emblemáticas es la jornada laboral de 8 horas, 8 horas de ocio y 8 horas de descanso, ya que anteriormente las jornadas laborales podrían llegar a ser de más de 18 horas.

Buena parte de este discurso nos muestra la importancia de las personas en la creación de la riqueza, es decir el trabajo que realizamos todos los días para obtener dinero y comprarnos cosas que satisfacen nuestras necesidades.

El primero de mayo no es un día de descanso en Estados Unidos, por lo cual, la mayoría (o sino es que todas las personas con empleo están trabajando) muchos se preguntan ¿por qué esto es así? Es un día que se celebra a nivel internacional y a nivel nacional en México (y como siempre el país vecino llevándole la contraria a todo el mundo), es una costumbre que los que hemos vivido ahí tenemos arraigada, no es como que lo celebremos en grande como un 15 de septiembre, pero siempre se recuerda el día con un poco de nostalgia, y recuerdos de convivencia con la familia ya que todos se encontraban descansando.

En el caso del país de los gringos esto no es así, en su lugar se celebra el “Labor day” el primer lunes de septiembre, donde escuelas, bancos, oficinas gubernamentales, y distintos comercios se encuentran cerrados.

Los mexicanos que vivimos en el país vecino y tenemos la suerte de tener ese día festivo celebramos realizando picnics, carnes asadas, reuniéndonos con la familia, o simplemente descansando en casa, ya que, es un día feriado, donde curiosamente se descansa para celebrar el acto de trabajar.

Aunque muchos tienen la ventaja de descansar y reunirse con sus familiares en “labor day” muchos otros no corren con la misma suerte pues sus empleadores no les dan el día. En Estados Unidos no existen leyes federales que exijan a los empleadores otorgar a los empleados días festivos pagados, o pagarles a los que trabajan esos días una compensación adicional, por lo que para muchos de nuestros paisanos tanto el 01 de mayo, como el primer sábado de septiembre es solo un día más, donde tienen que laborar.

No hay que olvidar que el día del trabajo, si bien es un día en el cual la mayoría de nosotros nos encontramos descansando o realizando actividades recreativas, estamos en este momento y en este lugar debido a que en la historia personas decidieron salir a luchar por sus derechos.